Entrevista de
Pedro Perucca
El XX Congreso Nacional del Partido Comunista de China se está llevando adelante en el Gran Salón del Pueblo de la ciudad de Beijing entre el 16 y el 22 de octubre. Además del abordar un análisis sobre la situación nacional e internacional, estableciendo una hoja de ruta para el período 2023-2028, es considerado un evento clave también por marcar la ratificación del liderazgo del actual presidente Xi Jinping, que será reelecto para un nuevo período de cinco años.
Según se había anticipado, el Congreso trabaja en el marco del Plan Integrado de Cinco Esferas (desarrollo económico, político, cultural, social y ecológico) y la Estrategia Integral de Cuatro Puntas (construcción integral de una sociedad moderadamente próspera, profundización de las reformas, gobierno de la nación de acuerdo con la ley y gobierno estricto del Partido).
Desde Jacobin dialogamos con el periodista argentino Gustavo Ng, que se encuentra en China en el marco de un programa del gobierno chino de acercamiento a la realidad del gigante asiático para periodistas de todo el mundo, quien viene siendo parte de la cobertura internacional de este crucial Congreso del Partido Comunista.
PP
¿Porqué este XX congreso del PC chino es noticia y el resto del mundo debería prestarle atención?
GN
El 20º Congreso del Partido Comunista chino se celebra con el objetivo de establecer el rumbo de los próximos años de uno de los países que mayor influencia ejerce en el mundo. Esta influencia está creciendo, de manera que lo que se decida para China, gravitará en la economía global. La gravitación se desplegará en dos órdenes. Por un lado, el propio peso de China, de su economía, su tecnología. Las necesidades de China son gigantescas, igual que su producción. Cualquier modificación puede tener consecuencias decisivas en todo el mundo. Por otro lado, China tiene una política específica hacia una nueva configuración del mundo a través del establecimiento de nuevas redes y de alianzas. Hasta ahora, desde el momento en que empezó a jugar el juego global hace 40 años, con el inicio de la etapa de la «Reforma y Apertura», China se ha atenido a las reglas globales, pero en la medida en que su poder crezca como jugador, es esperable que comience a negociar las reglas del juego mundial. Entendemos que ese momento ya empezó y que este congreso es un impulso importante.
PP
¿Te parece que se puede esperar alguna definición tan impresionante en este XX Congreso como la tomada en el anterior, cuando el líder del partido y presidente chino logró que se incorpore el «pensamiento Xi Jinping sobre el socialismo con características chinas» en la Constitución del partido (un logro que previamente sólo habían alcanzado dirigentes de la estatura de Mao Tse Tung y de Deng Xiaoping)? Más allá de la reforma de hace un par de años que le permite un tercer mandato, ¿qué líneas plantea Xi en este congreso para el próximo lustro?
GN
Todos los factores del 20º Congreso del Partido Comunista chino son tan previsibles como contundentes. El dato más sólido y central del congreso es la confirmación plena del rumbo que lleva el país, iniciado hace diez años con la primera presidencia de Xi Jinping. El documento que éste presentó en la apertura es una síntesis de los discursos que viene dando, tanto en los aspectos evaluativos de los últimos años, como en las líneas estratégicas que plantea para los siguientes. Ningún planteo es nuevo y todos son asombrosamente macizos. Podría decirse, un núcleo del congreso es el concepto de «seguridad nacional», que debe ser entendido en términos chinos, esto es, abarcando la defensa frente a amenazas exteriores y la paz interior, pero también la seguridad alimentaria, la soberanía tecnológica y el aseguramiento de las cadenas de suministro y de la energía. El crecimiento de China se ha dado sobre la base de la articulación del mercado doméstico con el mercado externo, pero el mercado interno se ha expandido enormemente y en este momento el mundo está sometido a turbulencias e incertidumbres, lo que le plantea a China la necesidad de establecer mecanismos de precaución, que en algunos casos llegan a hipótesis de autoabastecimiento, por ejemplo en comida.
PP
En cuanto a este eje en la seguridad nacional, ¿qué implica en cuanto a la relación con Taiwán?
GN
En el discurso de inauguración del congreso, Xi Jinping fue muy contundente con el tema de Taiwán. Dijo que China seguirá buscando el bienestar de todo el pueblo, y eso incluye a los taiwaneses, y que va a persistir buscando estrechar los lazos económicos y culturales con la isla. Dejó en claro que la reunificación nacional es, por un lado, un tema interno de China, y por otro, un asunto que pertenece a la historia, concebida como una «rueda que no se detiene». De la misma manera, dejó en claro que el uso de la fuerza sería el último recurso que usaría China ante la intervención de otros países en la cuestión de Taiwán; un recurso tan «último» como «irrenunciable».
PP
Otro de los ejes del discurso de apertura de Xi fue el de la eliminación de la pobreza extrema en los últimos años. ¿Qué significa esto concretamente para la sociedad china y cuál puede ser el impacto político de esta inmensa novedad? Algún otro eje que te haya parecido destacable de esa apertura.
GN
El fin de la pobreza extrema es objetivamente un hito impactante no sólo en la historia de China, sino en la historia de la humanidad. Los chinos son plenamente conscientes de esto y lo celebran patrióticamente. Saben que ellos hicieron el mayor aporte al alivio de la pobreza en el planeta, lo que genera una esperanza y una confianza en sí misma descomunales. En el congreso se considera que la erradicación de la indigencia concluye la etapa que tenía como objetivo conseguir una «sociedad modestamente acomodada». El congreso inaugura la siguiente etapa, que coincide con el centenario del Partido Comunista chino. Se habla de un «país socialista moderno» sin mayores precisiones sobre qué significa el término. En principio, se plantea un desarrollo más equitativo, lo que se materializa en elevar la calidad de vida de la población, y achicar la brecha entre los sectores de mayor poder equitativo y el resto de la sociedad.
PP
Sabemos que China, si bien mantiene un impresionante intercambio comercial con Rusia, no ha hecho declaraciones públicas de apoyo a su socio comercial en cuanto a su invasión a Ucrania. ¿El tema apareció de alguna manera en el Congreso?
GN
No apareció aún.
PP
Más en general, ¿qué caracterización hace China de la actual situación mundial y de su lugar en la próxima etapa? Con el retroceso de EEUU en cuanto a hegemón absoluto, ¿China se propone como reemplazante a corto plazo?
GN
Xi Jinping dijo en la inauguración que el escenario internacional está determinado por una coyuntura «compleja y desafiante». De todo lo que está trabajando el congreso en materia de relaciones exteriores, no se podría derivar que China busca reemplazar a los Estados Unidos. China no niega la primacía, pero no parece concebirla como exclusiva. Puede haber primacías varias. Más aún, parecería que se mueve mejor en mecanismos que integran opuestos, siempre que sean complementarios. Mientras para China fue negocio que Estados Unidos fuera el mayor país, se mostró modesta y concesiva. Ahora está en guardia ante la beligerancia de Estados Unidos, con lo que activa la «seguridad nacional» que mencionábamos.
PP
¿Hubo algunas definiciones respecto de la relación con América latina en el Congreso que puedan implicar cambios o rectificaciones respecto de los actuales proyectos enmarcados en la construcción de la Franja y la Ruta?
GN
Todo lo relacionado con América Latina puede subsumirse en lo expresado en el punto anterior. No figura como tema en el documento sometido por el 19º Comité Central al Congreso y no parece estar presente en las discusiones.