Inspirada por el optimismo ante el futuro de una nueva Alemania, la RDA creó su propia ciencia ficción: la «película utópica». Pero con su fosilización política, la vocación de futuro de este género también se agotó.
Notas publicadas en Alemania
El canciller alemán Olaf Scholz destituyó a su ministro de Finanzas y el país se encamina hacia las elecciones. Los problemas económicos estarán en el centro de la campaña pero sin propuestas para romper con la austeridad.
Un nuevo estudio expone una verdad incómoda para Die Linke: la base del partido de la izquierda alemana reside en los sectores de ingresos medios altamente educados. Aunque la nueva dirección promete reconstruir las raíces obreras, no será tarea fácil.
En medio de la creciente violencia y el auge de la extrema derecha, Ferat Koçak, diputado de Die Linke, reflexiona sobre la lucha contra el fascismo, el estado de la izquierda en Alemania y la importancia de apoyar a Palestina.
En Alemania, la nueva Alianza de Sahra Wagenknecht ha tenido buenos resultados electorales, pero su rechazo a la política de clases y su acercamiento a la derecha en temas de inmigración no auguran buenas noticias para la izquierda.
A menudo se piensa que los últimos años de la República de Weimar fueron testigos de una avalancha de literatura políticamente comprometida. Pero la historia es más complicada. Los escritores solían evitar enemistarse con una derecha resurgente para proteger sus vidas y sus carreras.
La ultraderechista Alternative für Deutschland obtuvo un gran éxito en las elecciones regionales en Alemania. El sombrío resultado muestra cómo las heridas de la reunificación están empujando a las regiones orientales hacia la extrema derecha.
El crecimiento electoral de Alternative für Deutschland demuestra que la derecha puede ganar en Alemania. Los partidos dominantes están promocionando amplias coaliciones para mantener a la AfD fuera del poder, pero muestran pocas señales de que pueden resistir sus mensajes antiestablishment.
Los relatos populares del nazismo a menudo afirman que Hitler llegó al poder democráticamente. Pero, el historiador Richard J. Evans argumenta que el fascismo alemán dependía de las milicias armadas para aplastar a los comunistas y socialistas.