Recientemente se ha descubierto que la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, es pariente lejana de Antonio Gramsci. Aunque políticamente se ubican en extremos opuestos, Meloni ha emprendido una campaña por el control de las instituciones culturales cuyas razones Gramsci comprendería bien.
Notas publicadas en Cultura
En los años 80 y 90, sucesivos pánicos morales ante el vandalismo y la violencia en la televisión británica culminaron en una campaña de la derecha contra un peligroso fenómeno social: las Tortugas Ninja.
El libro clásico de C. L. R. James sobre críquet utilizaba al como ventana a la historia de las Indias Occidentales cuando, desafiando al racismo, su pueblo se liberó del dominio colonial británico.
La última película de Martin Scorsese, Los asesinos de la luna, está bien pensada y es digna de admiración. Pero carece del clásico desenfreno y el brillante caos controlado que tanto disfrutamos de sus producciones cinematográficas.
Las nuevas derechas se encuentran embarcadas en una auténtica «guerra santa» contra todo lo que les huela a «marxismo cultural». Desde allí, buscan avasallar los derechos humanos, de las mujeres y de las minorías al mismo tiempo.
Durante sus años en Argelia, Karl Marx atacó con indignación los violentos abusos de los franceses y la desvergonzada arrogancia, presunción y obsesión de Occidente por vengarse de todo acto de rebelión de la población árabe de la región.
Un descenso al espantoso planeta de la ciencia ficción reaccionaria.
Alexander Bogdanov fue una figura clave del movimiento socialista ruso en los años previos a la revolución de 1917. Y también un pensador muy creativo, que escribió una novela de ciencia ficción sobre una civilización socialista en Marte.
En octubre de 1975, el periodista comunista Vladimir Herzog fue cobardemente asesinado por la dictadura brasileña. Este trágico suceso desencadenó una movilización social sin precedentes contra el régimen militar que fue clave para impulsar la redemocratización política del país.
Mario Arrubla y Estanislao Zuleta fueron dos intelectuales de la nueva izquierda colombiana de los años 60. Rescatar sus reflexiones y su legado nos permite abrir nuevos horizontes críticos con los que comprender la historia y el presente de Colombia.