El presidente salvadoreño Nayib Bukele es visto por Donald Trump como un autoritario de extrema derecha que tiene algo que él no tiene: un verdadero mandato popular.
Notas publicadas en Relaciones internacionales
La guerra comercial de Donald Trump nos adentra en una fase cualitativamente nueva de la historia del capitalismo. Sin embargo, el nuevo orden económico que está tomando forma es tan «globalista» como el régimen neoliberal al que suplanta.
Estados Unidos no vive una «crisis de migración», sino una suspensión del estado de derecho. Pero Trump no es el único con esta agenda.
Donald Trump anunció aranceles radicales para todos los socios comerciales de EE. UU., con el objetivo explícito de «liberar» a EE. UU. del comercio «injusto». Estos esfuerzos no solo son confusos, sino que encerrarán a Estados Unidos en un ciclo de estancamiento e inflación.
La nueva ley de gastos de Trump incluye un aumento de 485 millones de dólares para el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas. Una ganancia inesperada para oscuros contratistas de aviación que realizan los vuelos de deportación.
En una entrevista con Jacobin, la exministra de Energía de Colombia describe el plan del presidente de izquierda Gustavo Petro para que las naciones ricas que se benefician de su economía extractiva ayuden a pagar su transición ecológica.
Israel no sólo reanudó por completo su ataque genocida contra Gaza y el pueblo palestino sino que también retomó la matanza de periodistas.
Entrevista a la senadora colombiana María José Pizarro sobre los logros y desafíos del Gobierno de Gustavo Petro, su relación con los movimientos sociales y el nuevo escenario que plantea el segundo mandato de Trump.
En 1950, Francia emprendió un ambicioso esfuerzo para modernizar su imperio adoptando costumbres locales y promoviendo gobiernos autónomos limitados. No era más que el intento de crear una ideología moderna para el colonialismo, y fracasó.
El arresto de Mahmoud Khalil expone, una vez más, cómo la derecha miente cuando se presenta como defensora de la libertad de expresión. También deja en evidencia que la izquierda nunca debería haber cedido terreno en esta batalla.