Detrás de la confusión y los debates en torno al fascismo subyace una simple verdad: se trata de un juego de poder dirigido por las élites económicas. Los comunistas reconocieron que la fisonomía del fascismo está determinada por la dinámica de clases.
Artículos etiquetados como Italia
El mundo anhela las aceitunas Castelvetrano de Italia. Pero Italia no quiere contratar a los trabajadores necesarios para recogerlas.
La letra mata, el último libro del historiador italiano Carlo Ginzburg, es una invitación a leer los testimonios del pasado en contra de las intenciones de quien los produjo, para otorgarle así un lugar a las voces aplastadas por el silencio de la Historia.
Olviden la visión estereotipada de Maquiavelo como campeón del cinismo y la realpolitik. El filósofo político italiano fue un crítico hostil del gobierno oligárquico que buscó empoderar al pueblo y dar rienda suelta a su creatividad.
Hace 142 años fallecía Giuseppe Garibaldi, héroe de la unificación italiana. Contra los intentos de edulcorar su figura, es deber de la izquierda recordarlo como lo que fue: un revolucionario.
Esta semana se cumplieron 100 años del nacimiento de Rossana Rossanda. Mientras el Partido Comunista de su país buscaba una «vía italiana al socialismo» gradualista, ella insistía en que la lucha de clases en Italia estaba ligada al destino de la revolución internacional.
Admiradora de toda la vida de J. R. R. Tolkien, la primera ministra italiana de ultraderecha, Giorgia Meloni, se ha apropiado de las fantasías de Tolkien para adaptar el fascismo al siglo XXI.
Rossana Rossanda representó lo mejor de la generación atraída por el comunismo italiano en la década de 1940.
Tras participar en el levantamiento de la izquierda radical italiana, Franco Ramella se dedicó a escribir sobre la historia temprana del capitalismo y la resistencia de la clase obrera en Italia. Su brillante obra tiene fuertes ecos del famoso trabajo de E. P. Thompson.
Recientemente se ha descubierto que la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, es pariente lejana de Antonio Gramsci. Aunque políticamente se ubican en extremos opuestos, Meloni ha emprendido una campaña por el control de las instituciones culturales cuyas razones Gramsci comprendería bien.