La experiencia de la revolución rusa continúa proporcionando valiosas lecciones a los socialistas, siempre y cuando seamos capaces de superar las interpretaciones convencionales tanto de los partidarios de Octubre como de sus enemigos.
Notas publicadas en restringido
En el contexto de un debate historiográfico en curso que arroja nueva luz sobre la controvertida figura de Karl Kautsky, traducimos por primera vez al castellano un fragmento de la monumental biografía de Massimo Salvadori, una obra clásica y de referencia en el tema.
La historia de cómo se gestó la Revolución Rusa no es más que una sucesión de continuidades y rupturas, y tanto unas como otras son relevantes para la lucha por un futuro socialista.
Yuli Mártov fue una figura fundamental para la política revolucionaria en Rusia durante los últimos años del siglo XIX y primeros del XX. Analista y teórico de gran prestigio, fue un aliado leal de Lenin hasta que sus posiciones se bifurcaron en el segundo congreso de la socialdemocracia rusa.
Un nuevo paradigma para comprender la táctica bolchevique en las revoluciones de 1917.
Keynes Against Capitalism, un reciente libro de James Crotty, plantea un nuevo enfoque sobre la obra del autor, acercándola al socialismo. Pero ¿se trata de un acercamiento riguroso y, sobre todo, que nos resulte útil?
El concepto de «fuerza de trabajo» es más complejo de lo que indica la lectura tradicional de Marx. La fuerza de trabajo tiene un precio que no es la forma fenomenal del valor: se trata de una forma del valor que Marx define como «imaginaria».
En Italia, el sistema de escala móvil logró mantener los salarios por encima de los aumentos de precios. Pero en los años 1980 llegó un gobierno socialista que puso fin a este mecanismo e inició una tendencia que deprimió los ingresos obreros durante décadas.
El mundo actual está sumido en una crisis económica y social de magnitud histórica, pero seguimos desprovistos de alternativas consideradas socialmente viables. Según el crítico marxista Fredric Jameson, los socialistas podemos (y debemos) revivir los ideales utópicos.
En 2008, antes de su primera candidatura seria a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump expresó una admiración sin reservas por el modelo económico chino. Por aquel entonces, China era vista como un lugar en el que capitalistas como él podían buscar libremente una maximización de beneficios sin ninguna restricción regulatoria: En China, rellenan…