Rodrigo Paz ganó la presidencia con el voto del bloque popular, pero su programa y alianzas se inscriben en la continuidad neoliberal. La derecha boliviana busca recomponer su hegemonía con un nuevo ropaje «populista».
Notas publicadas en Elecciones
Contradiciendo a la mayoría de las encuestras previas, finalmente el democristiano Rodrígo Paz derrotó en el ballotage al ultraderechista Tuto Quiroga. El resultado no sólo confirma el colapso del MAS sino que cierra toda una época de hegemonia de izquierda.
La derrota en Buenos Aires quebró el aura de invulnerabilidad de Milei. Entre ajuste brutal, dependencia del salvataje de Trump y creciente malestar social, el gobierno libertario entra en su fase más frágil.
La histórica condena del expresidente Jair Bolsonaro a 27 años de prisión es una señal de la buena salud de las frágiles instituciones democráticas de Brasil. Pero no supone un final definitivo al largo asalto de la derecha contra la democracia brasileña.
Hace dos años, el partido alemán Die Linke se enfrentaba a una crisis existencial. Pero este año ha protagonizado un regreso histórico. Ferat Koçak, de Die Linke, explica cómo una campaña a favor del bienestar social y contra el racismo llevó a su partido a la victoria.
La experiencia del nuevo gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil pone de manifiesto que una estrategia frenteamplista durante la campaña electoral resulta decididamente menos eficaz a la hora de gobernar.
Pese al evidente giro a la derecha, las últimas elecciones bolivianas no modificaron la estructura de tercios electorales que viene de 2005. Pero el MAS, que conserva su núcleo duro, sufrió una gran pérdida de credibilidad en el histórico «tercio en disputa».
Steve Bannon, quien se autodenomina leninista, reconoció que las plataformas en línea y las tácticas de los movimientos pueden convertirse en armas políticas. Su éxito demuestra que herramientas desarrolladas para la solidaridad pueden transformarse en resentimiento.
Los bolivianos acuden a las urnas este domingo en medio de una crisis económica en espiral y el colapso total del MAS. Una victoria de la derecha podría traer de vuelta la austeridad neoliberal, desencadenando un nuevo ciclo de malestar social.
Las elecciones del 17 de agosto se juegan en un terreno marcado por la implosión del MAS, la proscripción de Evo Morales y el avance de la derecha. Andrónico Rodríguez representa la única alternativa por fuera del bloque conservador.