El poder económico se traduce en poder político. La clase capitalista está subvirtiendo la democracia y controlando la vida de miles de millones mediante inversiones masivas en todo tipo de sectores, desde alimentos hasta armamento.
Notas publicadas en Élites
Dos años después de su asunción, Gustavo Petro sigue afrontando una tenaz resistencia a su proyecto. Sus opositores en el Congreso se han unido para bloquear reformas laborales y de salud que son vitales para la clase trabajadora colombiana.
El preso político ruso Boris Kagarlitsky escribe para Jacobin y habla de la necesidad de una alternativa a la «lógica individualista del liberalismo moderno y a la agresividad totalitaria del nuevo conservadurismo».
Este año el juicio a un jefe de seguridad mexicano mostró que tanto el gobierno estadounidense como sus clientes en México estaban implicados en la actividad criminal que supuestamente intentaban detener.
Ayn Rand creía que el camino hacia la armonía social pasaba por la aceptación por parte de las masas inferiores del gobierno brutal de sus superiores naturales.
El caos que rodea a Sam Altman y OpenAI revela hasta qué punto la tecnología puede estar impulsada por la fantasía.
En los últimos años del siglo XX se crearon zonas económicas especiales que liberaron a los capitalistas de las limitaciones de la soberanía popular. Esto vino acompañado de ideologías libertarianas autoritarias.
Succession se acerca a su final después de mostrar que la búsqueda de la acumulación ilimitada por parte de los ultrarricos desplaza cualquier atisbo de humanidad. La serie es la crítica de clases más potente que se recuerda en la televisión reciente.
La heroica rebelión popular de los quechuas y aymaras del Perú ha desafiado al poder oligárquico asentado en Lima, que se resiste a ser derrotado. Pero solo la unidad del movimiento popular podrá lograr victorias que abran un nuevo periodo político.