Ayer se conoció la noticia del fallecimiento de Jean-Marie Le Pen. Estudiar su perfil es explorar el lado más oscuro de la historia francesa contemporánea, desde las acusaciones de tortura durante la guerra de Argelia hasta las de antisemitismo.
Notas publicadas en Élites
Marine Le Pen y Giorgia Meloni representan un nuevo modelo de marketing político de extrema derecha: pintan al neoliberalismo occidental como un faro de empoderamiento femenino, afirmando que defienden los derechos de las mujeres. Pero omiten que esos derechos solo son válidos para una minoría.
Después de lograr el primer alunizaje de una empresa privada, la start-up tejana Intuitive Machines está depositando los desechos de los ricos en la superficie lunar, una sombría señal de cómo los superricos planean plantar su bandera más allá de nuestro planeta.
Donald Trump afirmó que le quitará poder a los moderadores de contenidos y acabará con la «censura de izquierda». No deberíamos exagerar la importancia de tales movimientos. La desigualdad material, y no el discurso online, es lo que explica la derrota del electoral.
El descenso de los precios de las energías renovables no provocapó el auge previsto porque la energía verde aún no es suficientemente rentable para los inversores privados. La inversión y la propiedad públicas son esenciales para una rápida transición verde.
Aunque hace algunos años pareciera improbable, el Partido Demócrata devino en la organización por excelencia del capital estadounidense. En el camino, fue perdiendo todo vestigio de su base obrera.
Lo más importante de Donald Trump no es su condición psicológica, sino el hecho de que es un capitalista. Y de un tipo particular: un lumpencapitalista.
Donald Trump y sus aliados no lo ocultan: si ganan, van a lanzar una campaña de represión para destruir al movimiento propalestino y a la izquierda organizada.
Con el desarrollo de la inteligencia artificial avanzando a gran velocidad, algunos de los hombres más ricos del mundo pueden estar decidiendo ahora mismo el destino de la humanidad.