El Partido Comunista se posicionó como segunda fuerza en las elecciones generales de Rusia. Pero el ascenso de la organización avivó los reflejos represivos del gobierno de Vladimir Putin.
El Partido Comunista se posicionó como segunda fuerza en las elecciones generales de Rusia. Pero el ascenso de la organización avivó los reflejos represivos del gobierno de Vladimir Putin.