La renuncia forzada de Héctor Béjar en Perú no augura nada bueno para el gobierno de Pedro Castillo. Sin embargo, permite plantear una pregunta urgente: ¿por qué en el Perú no se puede hablar del terrorismo de Estado?
La renuncia forzada de Héctor Béjar en Perú no augura nada bueno para el gobierno de Pedro Castillo. Sin embargo, permite plantear una pregunta urgente: ¿por qué en el Perú no se puede hablar del terrorismo de Estado?