El liderazgo norteamericano está socavado por el deterioro económico y los fracasos bélicos, mientras que Rusia no participa de ese circuito dominante pero motoriza la gestación de un imperio no hegemónico y China plantea un protagonismo que no es sinónimo de expansión imperial.
Notas publicadas en Guerra
Resolver el conflicto armado en Colombia no será tarea fácil. Pero el nuevo gobierno contará con una fórmula eficaz para dar un giro a la historia: cambios sociales y garantías para la vida.
Desde la persecución de Steven Donziger hasta el asesinato de la periodista palestina estadounidense Shireen Abu Akleh, Estados Unidos hace caso omiso de la libertad de expresión en situaciones en las que los aliados corporativos se benefician.
Tras los embargos contra Rusia a partir de la guerra en Ucrania, Alemania busca convertirse en el actor determinante de la política energética europea.
El gobierno británico introdujo recientemente una legislación para amnistiar a los soldados que cometieron crímenes históricos en Irlanda del Norte.
Bajo el liderazgo de Fidel Castro, Cuba prestó apoyo a movimientos independentistas en todo el Tercer Mundo. Ese apoyo fue decisivo para luchar contra el apartheid sudafricano, frustrar operaciones encubiertas de los Estados Unidos y lograr la autodeterminación en el sur de África.
Si George W. Bush no va a ser juzgado por crímenes de guerra, debería al menos dejar opinar en público sobre guerras sin justificación, como hizo hace poco al referirse accidentalmente a la «totalmente injustificada y brutal invasión de Irak».
Es central clarificar el status internacional de Rusia, porque el hecho de ser hostilizada por la OTAN y Estados Unidos no la excluye automáticamente de una dinámica imperialista.