En 2008, antes de su primera candidatura seria a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump expresó una admiración sin reservas por el modelo económico chino. Por aquel entonces, China era vista como un lugar en el que capitalistas como él podían buscar libremente una maximización de beneficios sin ninguna restricción regulatoria: En China, rellenan…
Para acceder a la nota completa es necesario adquirir una suscripción.
Inicia Sesión o Adquiere tu suscripción
