Entre los años 50 y 70, keynesianos de izquierdas como Joan Robinson, que apoyaban firmemente el sindicalismo, lo consideraban una causa de la inflación, mientras que los monetaristas no.
Notas publicadas en homeCentro
William Morris no sólo fue un artista y diseñador brillante; también fue un socialista comprometido que se enfureció contra las injusticias del capitalismo y el imperialismo. Desde sus ensayos políticos hasta su novela utópica, nos dejó un legado vital.
Los debates sobre la nueva IA se centran en la «inteligencia». Pero ocurre algo más interesante: La IA es una máquina de cultura.
La teoría decolonial, ¿una astucia de la razón occidental?
El Manchester de los años 80 fue cuna de grupos como Joy Division y The Smiths y de una escena rave famosa en todo el mundo. La música surgió de las condiciones de vida en el Manchester posindustrial e, irónicamente, allanó el camino para una nueva oleada de inversión de capital.
El mundo de fantasía de Tolkien es una utopía medieval en la que la pobreza y la opresión quedan fuera de campo. Pero su obra también contiene una crítica romántica del capitalismo industrial, que es parte importante de su enorme atractivo popular.
Gramsci tiene el mérito de haber estudiado y puesto de relieve fenómenos sociales que en gran medida la tradición marxista había hecho pasar a un segundo plano.
Necesitamos un urbanismo socialista y feminista. Socialista, en tanto capaz de movilizar tiempo y recursos de forma planificada para objetivos que desbordan la rentabilidad. Feminista, en tanto consciente y comprometido con la superación efectiva de la división sexual del trabajo.
Todo lo que usted siempre quiso saber y nunca se animó a preguntar sobre Paraguay.