La sorprendente victoria de un candidato que representa a un partido "marxista y leninista" demuestra que no se puede ignorar al Perú rural. Pero se necesita mucha más organización si la izquierda peruana quiere construir un poder político duradero.
La sorprendente victoria de un candidato que representa a un partido "marxista y leninista" demuestra que no se puede ignorar al Perú rural. Pero se necesita mucha más organización si la izquierda peruana quiere construir un poder político duradero.