Napoleón, de Ridley Scott, toma una de las épocas más interesantes y complejas de la historia moderna y la convierte en una moralina conservadora sobre los peligros de la turba. Y lo que es peor, ni siquiera es convincente.
Notas publicadas en Cine y TV
En la pedestre lista de películas de Netflix figura ahora mismo una asombrosa farsa satírica en blanco y negro sobre un vampiro milenario que resulta…
Cuatro películas que muestran estrategias políticas y mediáticas como las de Steve Bannon, en las que se cimenta el crecimiento de las nuevas derechas, de Trump a Milei, pasando por el Brexit.
Star Trek imaginó un mundo más allá del capitalismo, el racismo y la opresión, en el que la tecnología se aprovecha para acabar con todas las formas de explotación e injusticia. Sus lecciones siguen siendo tan relevantes como entonces.
Oppenheimer, de Christopher Nolan, es una evocadora exploración de las contrastantes dimensiones de la modernidad.
Con el solo fin de ofrecer un espectáculo taquillero y atractivo para el público, Oppenheimer, de Christopher Nolan, ignora los aspectos más oscuros de la vida y obra de J. Robert Oppenheimer.
Asteroid City logra ser una de las películas más «wesandersonianas» de la filmografía del director, pero dejando a su paso un enorme vacío emocional.
Succession se acerca a su final después de mostrar que la búsqueda de la acumulación ilimitada por parte de los ultrarricos desplaza cualquier atisbo de humanidad. La serie es la crítica de clases más potente que se recuerda en la televisión reciente.
La nueva película Unrest ofrece varios condimentos poco habituales: un retrato magnífico del proceso laboral, un papel protagónico para el geógrafo anarquista Pyotr Kropotkin y una imagen precisa de la lucha por el control del trabajo en las fábricas.