El Perú, la tierra de Túpac Amaru y Micaela Bastidas, de Mariátegui y Arguedas, hoy comienza a recuperar su dignidad, a sentirse parte de la historia nuestramericana.
Notas publicadas en Elecciones
El desprecio de la élite limeña por los indígenas no pudo evitar la victoria de un candidato pobre, campesino y mariateguista.
Si hoy gana Pedro Castillo, la derecha va a ensayar muchas estrategias para desestabilizar y tratar de frenar los cambios de fondo. Es necesario articular a la izquierda e impulsar una fuerte movilización popular.
Los pueblos indígenas de Perú aguardan expectantes a las elecciones del domingo. Dos proyectos enfrentados podrían significar cosas muy diferentes para el futuro de las luchas indígenas, y con ello, el futuro del país.
La disyuntiva es clara: autoritarismo neoliberal o asamblea popular constituyente.
El próximo 6 de junio tendrá lugar la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Perú. Según José Luis Rénique, la intensidad y dureza con que se vivió el balotaje responden a la puesta en marcha de un intento serio por revertir la larga historia de sometimiento de las regiones por parte de Lima.
Una victoria de Pedro Castillo significaría no solo asestar un duro revés al fujimorismo, sino también la posibilidad de poner en agenda una transformación social tan significativa como aquella de Juan Velasco Alvarado.
Tras las elecciones de mayo, el Partido Comunista chileno ha regresado con fuerza al centro de la vida política. Para aprovechar la oportunidad histórica, debe hacer un balance de sus aciertos y errores en las últimas décadas.
En Perú, los poderes fácticos se han planteado una agenda única: la salvación del modelo económico del «fantasma comunista» sin importar el precio moral, institucional y de derechos que esto implique.